Read Comentarios psicológicos sobre las enseñanzas de Gurdjieff y Ouspensky Volumen II Online
Authors: Maurice Nicoll
Tags: #Autoayuda, #Esoterismo, #Psicología
"¿Qué
hacer?"
preguntó G., como si estuviese sorprendido. "Es imposible
hacer
nada. Ante todo un hombre debe
comprender
ciertas cosas. Tiene miles de falsas ideas y de falsos conceptos, sobre todo acerca de sí mismo, y es preciso que se libre de algunos de ellos antes que pueda adquirir algo nuevo. De otro modo lo nuevo se construirá sobre fundamentos equivocados y el resultado será peor que antes."
"¿Cómo es posible librarse de las ideas falsas?" pregunté. "Dependemos de las formas de nuestra percepción. Las ideas falsas son producidas por las formas de nuestra percepción."
G. movió la cabeza. "Otra vez habla de algo diferente", dijo. "Habla de los errores que surgen de las percepciones, pero yo no hablaba de ellos. Dentro de los límites de las percepciones dadas el hombre puede engañarse en mayor o menor grado. Como dije antes, la principal ilusión del hombre es su convicción de que puede
hacer.
Todas las gentes creen que pueden hacer, todos quieren hacer y la primera pregunta que todos hacen es preguntar qué van a hacer. Pero en realidad nadie hace nada y nadie puede hacer nada. Esta es la primera cosa que es preciso comprender.
Todo sucede.
Todo cuanto le acaece a un hombre, todo lo que él hace, todo lo que proviene de él —
todo esto sucede.
Y sucede exactamente de la misma manera que la lluvia cae de resultas de un cambio en la temperatura de la atmósfera; de la misma manera que la nieve se derrite bajo los rayos del sol, que el polvo se levanta con el viento. El hombre es una máquina. Todos sus hechos, acciones, palabras, pensamientos, sentimientos, convicciones, opiniones y hábitos son el resultado de las influencias externas, de las impresiones externas. Por sí mismo el hombre es incapaz de producir un solo pensamiento, una sola acción. Todo cuanto dice, hace, piensa, siente —todo eso sucede. El hombre no puede descubrir nada, no puede inventar nada. Todo sucede. Establecer este hecho por sí mismo, comprenderlo, estar convencido de su verdad, significa librarse de miles de ilusiones sobre el hombre, sobre su capacidad de crear y organizar conscientemente su propia vida, y así sucesivamente. No hay nada de eso. Todo sucede —los movimientos populares, las guerras, las revoluciones, los cambios de gobierno— todo esto sucede. Y sucede exactamente de la misma manera en que todo sucede en la vida del hombre individual. El hombre nace, vive, muere, "construye casas, escribe libros, no como desea hacerlo, sino como sucede. Todo sucede. El hombre no aborrece, no ama, no desea —todo eso sucede.
"Pero nadie lo creerá si le dice que no puede hacer nada. Esta es la cosa más ofensiva y más desagradable que puede decirse a la gente. Y es particularmente desagradable y ofensiva porque es la verdad. Y nadie desea conocer la verdad."
Esta noche daremos comienzo al estudio del diagrama llamado Eneagrama (o diagrama de nueve). Dicho diagrama es peculiar a esta enseñanza. Cuando G. lo impartió por primera vez hizo la observación que varias cosas en este sistema podían encontrarse en otros antiguos sistemas de enseñanza esotérica, pero no el Eneagrama. Sobre este particular dijo que si bien varias cosas pertenecientes a este sistema podían descubrirse en los fragmentos que nos han llegado de otros sistemas, nada en ellos está propiamente organizado ni arreglado, y no se puede ver cómo una cosa depende de otra. Todas las partes de este sistema están relacionadas unas con otras en el orden correcto para formar un todo orgánico —un organismo viviente. El Hombre y el Universo se toman juntos. La enseñanza sobre el Hombre está relacionada con la del Universo, cuyo hijo es, y se muestra que lo que existe en él, existe también en el Universo. La significación del Hombre en evolución y la significación del Universo en evolución, y las leyes del Hombre y las leyes del Universo, se estudian juntas porque son inseparables.
Al hablar sobre el Eneagrama G. dijo que postulaba toda la enseñanza del Trabajo y que cuanto mejor se lo entendía, más se comprendía el Trabajo. En una oportunidad al preguntársele de qué trataba, G. dijo que representaba la unión de la Ley de Tres o Ley de la Trinidad, y de la Ley de Siete, o Ley de la Octava. Recordemos que la Ley de Tres establece que en toda manifestación deben intervenir tres energías, activa, pasiva y neutralizante, y que éstas son las energías creadoras que crean los diferentes órdenes de mundos en escala descendente, incrementando el número de leyes a medida que se duplican. Asimismo debemos recordar que existe una segunda ley, la Ley de Siete, que se refiere al
orden de
manifestación.
Si hay una energía creadora debe de haber también
orden
en la creación, o todo será un caos. En el Eneagrama está representada la interacción de estas dos leyes de tal modo que una no obstaculiza ni ahoga a la otra, y que así todas las posibilidades llegan a ser realizadas. Pero en la etapa en que estamos sólo cabe esperar una simple lectura del Eneagrama.
Está construido de la siguiente manera: se divide un círculo en nueve partes iguales. El numero 7 se divide luego en 1, lo que da el resultado
142 857
como periodo recurrente. Se trazan líneas que ponen en conexión dichos números —a saber, de 1 hasta 4, etc. Observarán varias cosas. Primero, el diagrama es
simétrico.
Segundo, tres números no aparecen: 3, 6 y 9, todos múltiplos de 3. Tercero, advertirán que las líneas se cruzan. Uno de los puntos donde se cruzan está exactamente en la línea media, los otros dos son laterales y equidistantes de ella.
Señalemos luego por medio de flechas las direcciones representadas por las líneas. El punto de partida del Eneagrama es de cifra 1, porque el Eneagrama es un diagrama en movimiento y representa de dos maneras los movimientos de las cosas. Señalaré únicamente dos. Partiendo de 1, hay un movimiento a 4 a lo largo de la línea 1- 4. Luego de 4 a 2, cruzando el área donde 3 habría de estar pero falta. Luego de 2 un movimiento se produce en línea recta a través de 8, hasta 5, y luego a través del área donde 6 habría de estar hasta 7. Luego el movimiento regresa en línea recta cruzando la figura hasta 1, pero al hacerlo así cruza la línea 2-8. Este es un movimiento. El segundo movimiento es exterior a la circunferencia desde la 2 a 4 a 5 a 7 a 8. Coloquemos junto al número 1 la nota
Re,
y junto a 2 la nota
Mi,
y junto a 4 la nota
Fa
. Por el momento esto basta para ver los dos movimientos que he señalado. Verán que dentro del Eneagrama hay un movimiento de 1 a 4, y luego a 2 —esto es, 1, 4, 2. Y hay otro movimiento posible pasando por la circunferencia, de 1 a 2 y a 4 —esto es, 1, 2, 4. Coloquemos el resto de las notas de la octava en torno de la circunferencia, terminando con
Do
en el punto más alto.
El diagrama es ahora semejante a esto:
Señalemos el movimiento posible sobre la circunferencia desde el punto
Re
al punto
Mi,
a
Fa,
a
Sol
, etc. por flechas curvas, que indican un movimiento semejante al de las agujas de un reloj. Los otros movimientos cruzados que tienen lugar dentro del Eneagrama ya fueron señalados por seis flechas, una en cada una de las seis líneas que unen las cifras en la circunferencia en el orden 142857 —el número obtenido dividiendo 1 por 7.
Reflexionemos ahora sobre este extraordinario diagrama, porque a menos de aprehender su misterio, lo tomaremos como tomamos todas las demás cosas. Este diagrama debe ser recibido por las partes superiores de los centros. Cuando se siente que algo es extraordinario, significa que cae en las divisiones superiores de los centros. Todo el Trabajo debe ser recibido allí. Consideremos una de las grandes enseñanzas del Trabajo. El Trabajo no nos enseña que vivimos en un Universo moribundo sino que vivimos en un Universo en evolución. Todo está creciendo según su propio tiempo y escala.
La Luna, la Tierra, el Sol, todos están creciendo en periodos colosales de tiempo si los comparamos con nuestro reducido tiempo y escala. Todo lo que fue creado está tratando de llegar a su creador. Hagamos una comparación aparentemente trivial pero que, según mi parecer, es legítima. El Universo, que se inicia en la Unidad, se extiende como un trozo de elástico. Busca regresar a su fuente, eliminar la tensión. (Aquí podría mencionar muchas cosas sobre la tabla química de elementos y las tendencias de éstos a combinarse unos con otros con el fin de llegar al equilibrio.) Ahora bien, el Rayo de Creación representa al Absoluto como 1 y todos los niveles de creación que derivan de él como números —a saber, 3, 6, 12 y así sucesivamente. En la escuela esotérica de Pitágoras se decía que todas las cosas son
números.
¿Han pensado alguna vez en las relaciones de los números? Se puede multiplicarlos o dividirlos. ¿Qué significa la división? Supongamos que el número 3 desee regresar al 1. Imaginemos que luche por pasar al 1 —es decir, a la Unidad Absoluta. Matemáticamente, esto es representado por 1
dividido
por 3. Ahora bien, si 3 trata de pasar a 1 de modo que éste lo absorba —y toda la creación busca regresar a su fuente y ser absorbida por ella— ¿qué sucede entonces? Dividamos 1 por 3. 3 en 1 está contenido 03 veces (esto es, en 10) y nos deja como residuo 1. Otra vez está contenido 3 veces y deja 1 como residuo. Así 3 en 1 = 0,3 en una eterna recurrencia. Y todo el Rayo tomado como 7 notas, en su intento de encontrar solución y paz, pasa a la Unidad Absoluta como 7 en 1 (es decir, 7 en 10 está contenido 1 y deja 3 como residuo, en 30 está contenido 4 y deja 2 como residuo, en 20 está contenido 2 y deja 6 como residuo, en 60 está contenido 8, etc., etc.). Así ven que 3 y 7 no pueden retomar a 1, mientras que 1 está en todos los números. Uno está en 3, pero 3 no puede regresar a 1, y así sucesivamente. El Universo está construido con números tal como lo enseñó Pitágoras —pero es menester agregar otra cosa. Toda la creación, todo el Universo creado, sea cual fuere su nivel o número, busca retornar a su fuente —esto es, busca entrar en 1 o "Unidad". La Trinidad —o 3— buscando hacerlo es "eterna" porque siempre se reproduce a sí misma y así se recuerda a sí misma. El número 7 es también eterno pero en el tiempo y de este modo no en el mismo sentido. Se pierde a si mismo y encuentra su ser en una repetición de lo que no es sí mismo —es decir, en la constante repetición de 1 4 2 8 5 7. Ya que este diagrama se refiere al Hombre y sus posibilidades, empieza con 7 y las propiedades de este número en relación con la Unidad. Estudiando las propiedades de 7 en relación con la Unidad encontramos que están dadas por el número 1 4 2 8 5 7. Esto por sí mismo no tiene significado alguno. Pero dado en el cuadro del Eneagrama, encontramos que da origen a una extraordinaria relación, extraordinaria debido al diagrama simétrico. El número 1 4 2 8 5 7 por si mismo no tiene nada de simétrico. La única cosa que cabe decir acerca de ese número es que se repita infinitamente en términos del sistema decimal y que no contiene ni 3 ni tampoco ningún múltiplo de 3. Esto es notable. Este número tiene también otras propiedades. Pero lo que es preciso aprehender es que el Universo creado busca por la evolución retornar a su fuente y que todas las cosas anhelan esta satisfacción o realización. Todo está en estado de privación, es incompleto, como una creación disgregada, y todo busca completarse —el átomo, el hombre, el planeta, el sol, la galaxia. En lo que concierne a la Unidad absoluta, no está tan sólo dividida en dos o en cuatro sino que está bajo 48 energías divisoras. Pero esta reflexión está dirigida a aquellos que ya meditaron sobre el Rayo.
La próxima vez hablaremos del Espíritu Santo dentro del Eneagrama, por lo cual es hecho viviente. Hasta ahora sólo nos hemos referido brevemente a la serie
Re
,
Mi
, etc. —esto es, a la Ley de 7— y a la relación interior de las notas.
Los puntos que están en relación por el trazado de las líneas internas entre los números obtenidos de la división de 1 por 7 —a saber, los números 1 4 2 8 5 7— dan una figura simétrica de gran belleza. Pero en esta figura no están incluidas tres posiciones. Unamos estos tres puntos. Aparece un triángulo, sobreañadido a la figura previa y en relación simétrica con ella, en los ángulos donde deberían aparecer los números 3, 6 y 9. Agreguemos esos números.