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Authors: Mario Benedetti

Tags: #Poesia

Inventario Uno 1950-1985 (39 page)

BOOK: Inventario Uno 1950-1985
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no tengo tiempo.

Paso que pasas

rostro que pasabas

qué más quieres

ay no

ay no me tientes

que si nos tentamos

no nos podremos olvidar

adiós.

AUSENCIA

El niño que no vino

tiene los labios fuertes

tiene las manos tiernas

el alma como nube

no es nadie

es sólo niño

saca viejas monedas

del bolsillo de Dios

se parece a la madre

su misma risa ancha

su corazón a saltos

juega con los silencios

y con ellos hace otros

silencios

y se aburre

el niño que no vino

no viene

porque cree

que todo el que aquí nace

no se muere

después.

AHORA VALE LA PENA

Ahora vale la pena.

Dios

se quedó dormido.

Todos sabemos que esto

no es

definitivo

que es una suerte loca

quizá un breve

delirio.

Ahora vale la pena

vivir

aunque haga frío

aunque la tarde vuele.

O no vuele.

Es lo mismo.

Ahora sí

pero luego

si Dios no se despierta

qué pasará

diosmío.

EL ÁNGEL

La paz oh la paz

quién habló de la paz

aquel viejo con cara de caballo

que mira sin mirar y a veces pide

ése habló de la paz

aquella jovencita con arrugas

que recuerda sus épocas de virgen

ésa habló de la paz

aquel atleta de campera verde

aquel tímido lleno de rencores

aquel horrible y sabio lustrabotas

ése ésos hablaron de la paz

aquella ama de casa con bostezos

aquel auxiliar cuarto que no fuma

aquel santo que piensa cuando vota

aquel bobo que cree en una bandera

todos ésos hablaron de la paz

pero qué pena

que grandísima pena

todos tan inocentes

tan alegres

no saben que la paz dependía de un ángel

y ese ángel tiene ahora

un dedo en el gatillo.

ASÍ RODEADO

Otra vez estoy solo

tan hondamente

solo

que no siento la ayuda

ni el calor

de tu mano

ni tu nueva mirada

ni siquiera la antigua

universal

tristeza

tan libremente

solo

que no puedo acordarme

de cómo era el mundo

con su pobre

tranquila muchedumbre

con sus brazos abiertos

con su espalda vencida

tan claramente

solo

que las paredes lloran

los vagabundos lloran

los solitarios lloran

y se alejan

ah pero éstos

éstos los sobornables

solitarios

antes de irse me envuelven

en una blanda

ojeada

que parece piedad

pero es

envidia.

MÁS O MENOS LA MUERTE

La muerte es sólo un niño

de cara triste

un niño

sin motivo

sin miedo

sin fervor

un pobre niño viejo

que se parece

a Dios.

A veces

sin embargo

es tan sólo un silencio

sin pasado

sin molde

sin olor

un silencio en que ladran

los perros

esos perros

y uno se pregunta

quiénes son.

A veces.

Otras veces

es una niebla espesa

que se mete en los ojos

que destruye la voz

y lo arrincona a uno definitivamente

bueno

definitivamente no

tan sólo hasta que uno

se siente

sin amor.

A veces.

Pero es raro.

Por lo común la muerte

es solamente un niño

de cara triste

un niño

que sale de la noche

sin motivo

sin miedo

sin fervor

un pobre niño viejo

que deja caer su mano

sobre mi corazón.

POBRE DIOS

Es imposible estar seguro

pero tal vez sea Dios todo el silencio

que queda de los hombres

es imposible estar seguro

pero acaso Dios sea

la soledad total

irrevocable

más grave que la tuya

o que la mía

por lo menos más grave que la mía

que es soledad tan sólo

cuando el viejo crepúsculo me mira

como un toro furioso

y yo no tengo a mano

tus sabios labios para

olvidarme de todo lo que temo

es imposible estar seguro

ah pero en ese caso

pobre Dios qué tristeza

debe ser su tristeza

pobre Dios

si una vez descendiera

a asir nuestra miseria

y respirara por unas pocas horas

el incesante miedo de la muerte

quizá mucho después

allá

solo y eterno

recordara esa tibia bocanada

como el único asueto

de su enorme

desolado Infinito.

CINCO VECES TRISTE

1.
Barco Viejo

La tristeza del mundo

es decir mi tristeza

empezó hace treinta años

en una noche hueca.

Por entonces los ángeles

trepaban por mis nervios

me dejaban promesas

me colgaban temores

y eso alcanzaba para todo el tiempo

para entender la vida

todo el tiempo.

Después de todo

no eran ángeles

eran tan sólo

escalofríos.

También tuve y no tengo un abuelo

con un siglo de cuentos

y una barba de seda

y dijo buenas noches

y se metió en su sueño

como huésped antiguo y de confianza.

Claro

no era su sueño

era su única muerte

nada más.

Por entonces había

nubes como montañas

y el horizonte era una cuerda floja

y los lunes

y miércoles

y viernes

Dios hacía equilibrio

sin caerse.

Pero no era Dios

era tan sólo

un barco viejo.

2.
Es tan poco

Lo que conoces

es tan poco

lo que conoces

de mí

lo que conoces

son mis nubes

son mis silencios

son mis gestos

lo que conoces

es la tristeza

de mi casa vista de afuera

son los postigos de mi tristeza

el llamador de mi tristeza.

Pero no sabes

nada

a lo sumo

piensas a veces

que es tan poco

lo que conozco

de ti

lo que conozco

o sea tus nubes

o tus silencios

o tus gestos

lo que conozco

es la tristeza

de tu casa vista de afuera

son los postigos de tu tristeza

el llamador de tu tristeza.

Pero no llamas.

Pero no llamo.

3.
Cáscara y nada

A veces el futuro es un sueño cerrado

y uno arroja la llave al precipicio

el corazón a veces nos despierta a los gritos

y uno se vuelve sordo de ternura

a veces es preciso que se nos caiga el cielo

para saber todo lo que nos falta

para inventar el surco del insomnio

para quedarse a solas con el mundo.

Casi siempre es la hora de la verdad vacía

sólo cáscara y nada

Dios inmóvil

es el temor recién amanecido

y ya opaco de veras

ya de veras maldito.

A veces el futuro es una noche sola

y uno gasta la urgencia en llegar y dormirse.

4.
Mi pozo

La soledad es una paz oscura

una suerte de luto sin orgullo

una tranquila sumisión

un pozo

la soledad es uno mismo

sin compasión y con vergüenza

pero también es una dulce

lengua

para hablar con los monstruos

de la noche

y quedarse como siempre

perplejo.

A veces

cuando el amor se ajena

o los amigos van quedando inmóviles

o el tacto y la conciencia recomponen

las averías de lo inefable

suelo ponerme mi soledad

y nadie

reconoce ese luto sin orgullo

ese decir lo mismo hasta el cansancio

esa tranquila sumisión

mi pozo.

5.
Ruidos secundarios

Me hago el honor de resignarme

sólo esta noche

como descanso

mañana temprano abriré los ojos

seré otra vez valiente y ordinario

rebelde con las manos en los bolsillos

eterno con la muerte en el ojal

sólo esta noche en que no hay luna

creerme que voy

creerme que vengo

creer que mi corazón ya no podrá jamás

aumentar de tamaño y de nostalgias

sólo esta noche

por favor

por piedad

sentirme vencido

humilde

devastado

hecho y deshecho con desechos de Dios

puesto a soñar sin vistobueno

dado a mentir sin esperanza

pero sabiendo que se trata

sólo de esta noche estéril y única

mañana a las siete abriré los ojos

y otra vez pondré el hombro sin quejarme

y escucharé el estruendo universal

sin que me engañen ruidos secundarios.

POEMAS DE LA OFICINA

1953-1956

SUELDO

Aquella esperanza que cabía en un dedal,

aquella alta vereda junto al barro,

aquel ir y venir del sueño,

aquel horóscopo de un larguísimo viaje

y el larguísimo viaje con adioses y gente

y países de nieve y corazones

donde cada kilómetro es un cielo distinto,

aquella confianza desde no sé cuándo,

aquel juramento hasta no sé dónde,

aquella cruzada hacia no sé qué,

ese aquel que uno hubiera podido ser

con otro ritmo y alguna lotería,

en fin, para decirlo de una vez por todas,

aquella esperanza que cabía en un dedal

evidentemente no cabe en este sobre

con sucios papeles de tantas manos sucias

que me pagan, es lógico, en cada veintinueve

por tener los libros rubricados al día

y dejar que la vida transcurra,

gotee simplemente

como un aceite rancio.

ELLOS

Ellos saben si soy o si no soy,

ellos abren la puerta y dicen: "Pase",

miran y relativamente son felices,

endosan el destino como un cheque

y eructan, aquiescentes, sin provocar a nadie.

Ellos saben si soy o si no soy,

por detrás de los dientes dicen: "Hola",

hablan y relativamente son ingenuos

y sencillos y escupen y recelan

y transpiran a veces en dos dedos de frente.

Ellos saben si soy o si no soy,

ellos cierran la mano y dicen: "Pero",

viven y relativamente son milagros

y sueldo y providencia y mal aliento

y gastan por docenas los pañuelos sin lágrimas.

Ellos saben si soy o si no soy,

ellos miran al cielo y dicen: "¿Cuánto?",

pasan y relativamente son nombrados,

pero yo, como ellos me instruyeron,

no digo ni caramba ni ahí te pudras.

EL NUEVO

Viene contento

el nuevo

la sonrisa juntándole los labios

el lápizfaber virgen y agresivo

el duro traje azul

de los domingos.

Decente

un muchachito.

Cada vez que se sienta

piensa en las rodilleras

murmura sí señor

se olvida

de sí mismo.

Agacha la cabeza

escribe sin borrones

escribe escribe

hasta

las siete menos cinco.

Sólo entonces

suspira

y es un lindo suspiro

de modorra feliz

de cansancio tranquilo.

Claro

uno ya lo sabe

se agacha demasiado

dentro de veinte años

quizá

de veinticinco

no podrá enderezarse

ni será

el mismo

tendrá unos pantalones

mugrientos y cilíndricos

y un dolor en la espalda

siempre en su sitio.

No dirá

sí señor

dirá viejo podrido

rezará palabrotas

despacito

y dos veces al año

pensará

convencido

sin creer su nostalgia

ni culpar al destino

que todo

todo ha sido

demasiado

sencillo.

VERANO

Voy a cerrar la tarde

se acabó

no trabajo

tiene la culpa el cielo

que urge como un río

tiene la culpa el aire

que está ansioso y no cambia

se acabó

no trabajo

tengo los dedos blandos

la cabeza remota

tengo los ojos llenos

de sueños

yo qué sé

veo sólo paredes

se acabó

no trabajo

paredes con reproches

con órdenes

con rabia

pobrecitas paredes

con un solo almanaque

se acabó

no trabajo

que gira lentamente

dieciséis de diciembre.

Iba a cerrar la tarde

pero suena el teléfono

sí señor enseguida

comonó cuandoquiera.

CUENTA CORRIENTE

Usted que se desliza

sobre el tiempo,

usted que saca punta

y se persigna,

usted, modesto anfibio,

usted que firma con mi pluma fuente

y tose con su tos y no me escupa,

usted que sirve para

morirse y no se muere,

usted que tiene ojos dulces como el destino

y dudas que son cheques

al portador

y dudas

que le despejan Life y Selecciones,

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